En esta entrega de “Al Punto Nemo”, César Vidal envía a Pedro Sánchez Pérez-Castejón, presidente del Gobierno de España, al lugar más inaccesible del planeta: el Punto Nemo, el remoto “cementerio de naves espaciales” en pleno Pacífico Sur.

A lo largo del episodio, César Vidal repasa —con la ironía afilada y la precisión que caracterizan a la sección— una larga serie de actuaciones, escándalos y decisiones políticas asociadas a Pedro Sánchez: desde las sospechas sobre su tesis doctoral y su ascenso interno en el PSOE, hasta las tramas de corrupción que rodean a su entorno, su gestión económica, la sumisión a intereses globalistas, el deterioro de los servicios públicos, la deriva hacia la inseguridad ciudadana o sus concesiones a Cataluña y a Marruecos.

Sin embargo, nada de eso es lo que motiva su envío simbólico al Punto Nemo. El detonante, según explica César Vidal, es la revelación de una reunión secreta de Pedro Sánchez con el dirigente de ETA, Arnaldo Otegi, con el objetivo de afianzar su continuidad en el poder. Un hecho que, para el presentador, cruza una línea moral y política inadmisible.

Un episodio contundente, directo y sin concesiones en el que César Vidal concluye con un veredicto rotundo:
“Pedro Sánchez… ¡al Punto Nemo!”