Francamente Don César, me llenan de una inmensa desazón todos sus programas. Soy español, de Cataluña, así que figúrese todo lo que ya llevo a mis espaldas a nivel político, que unido a lo que, con gusto y pesar, aprendo cada día con usted, me hunde en un pesimismo que no es propio de mi carácter.
Normalmente veo esperanzas para la humanidad en muchísimas facetas, pisoteado mayoritariamente por las clases dirigentes, no solamente políticas, puesto que estas suelen ser marionetas cobardes de otros, que usan su debilidad moral para beneficio propio y en detrimento nuestro.
Dicho esto ¿qué soluciones ve usted? ¿podría hacer algún programa donde se nos muestre vías de salida?
Hace muy poco estuve hablando un largo rato con un juez, bien conocedor de los entresijos del país, que me cercenó todavía más la esperanza, dándole la razón a usted y a los editoriales extranjeros que indican que España es un país fallido. Entre otras muchas cosas, me dijo que si un alcalde no cumplía una promesa importante de salud pública de un pueblo (caso real y dura años) y encima se le volvía a votar, la culpa era del mismo pueblo que legitimaba la gestión hecha, y el problema seguía; en cambio si al mes de no haberlo solucionado hubiera salido humo del ayuntamiento, todo estaría ya resuelto. Es una manera sin duda efectiva, pero que nos acerca a una barbarie que considero no deseable...entonces ¿qué otras formas tenemos de enderezar este país?